La voracidad de Facebook, su urgencia, hizo que me dedicara en exclusiva a su mantenimiento, entregado a su ritmo acelerado. Qué difícil es estar al día en Facebook.
A partir de hoy me centraré en ambas, aprovechando lo bueno de cada una de ellas.
Espero veros mucho por aquí. Encontraréis, poemas, vídeos, opiniones, etc.
Para comenzar os dejo un poema de mi libro Los desperfectos:
DÍAS EXTRAÑOS (NV DIXIT)
¿En qué exacto momento asoma el alba?
¿Quién discierne milimétrico
la línea que separa su espera
y el reflejo de niños durmiendo?
Siempre tuve la cierta impresión
de marchar, de huir tardíamente,
de mantener flores muertas en mis manos.
Yo sé lo que es esperar
entre cadáveres y recuerdos,
siempre por este orden,
una noche tras otra.
¿Cuándo hay que olvidar un nombre?
Jamás diré que sé o supe
por quién calla el silencio.
Y, si acaso me preguntan, diré
que no llegaste nunca
y que, tampoco, nos quisimos tanto.
Inspirada en Días extraños,
El tiempo de las cerezas,
Nacho Vegas y Enrique Bunbury
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